All In
Es tiempo de regresar al viejo hábito de recorrer la memoria
y seleccionar pasajes dignos de un recordatorio eterno. Menuda manera de
terminar un año y empezar otro… es tan rico no saber qué pasará o a quién
conocerás mañana…
Siento mi piel arder y refrescarse con el aire de la noche,
no ando muy en mis cabales y puedo decir que la coherencia se me va escapando
poco a poco sin importarme mucho la verdad. Siento tantas cosas al mismo tiempo
que ya no puedo estructurar mis pesares, no diferencio placeres de banalidades.
Así aparece alguien que puede hacerme volar por momentos… tan cobardes de
seguir actuando como simples conocidos.
La inseguridad vuelve a ser parte de mí, la inestabilidad
amenaza con volver y yo simplemente, ya cansada, me atrevo a sucumbir en sus
brazos, ¡Dios sabe que es eso o volverme loca y arrastrar al resto en mi
vórtice de rabia!
Sensación más excitante la de sentir una presión de agua
fría rozándome la piel y dando pie a que mantenga el silencio e interprete cada
gota que me hablaba y me tocaba.
Cierro mis ojos y dejo que mis manos solas expresen su
voluntad rebelde y reprimida. La angustia de que puedo quedarme dormida a mitad
de una ráfaga inspiradora, la zozobra de haber perdido “el toque”, la necesidad
versus el poder…
Ahora cada día de la semana tiene la duración de un mes pero
transcurre en menos de una milésima de segundo, algo ilógicamente sensato.
Tengo una sensación de amargura, de estar entre la espada y
la pared. Tengo miedo de haber cruzado la línea de la estupidez y de estar
convirtiéndome en algo que siempre aborrecí y renegué de ser. Últimamente estoy
cuestionando a mi consciencia y mi moral, otras veces solo hago caso a eso de
vivir el hoy, pero parece que lo he tomado muy a pecho.
Lo bueno de tener los “días contados” en ciertas
situaciones, es que sabes que hay una fecha de caducidad para la calamidad
existente y que de todas maneras terminará… pero aunque la ocurrencia del hecho
se interrumpa, no quiere decir que será borrado del historial… en sí, hay
terceros involucrados, afectados y podría decir que el de la herida más grave
es uno mismo.
“Ahora es cuando puedes cometer burradas, aprender y seguir
caminando…”, veo que las “burradas” a veces pueden tornarse feas y en
problemones serios, “…vas a ganar más de lo que perderás…”, eso lo dejaré en
tela de juicio, porque hasta ahora solo figura un gran déficit en mi balance.
Fue bueno aparecerse en un sitio donde se es un perfecto
desconocido. Creo que exiliada hería menos y reflexionaba más. Aunque en mi
monotonía pensé aún disfrutar del silencio y la soledad, pues me equivoqué. Tan
sumergida estoy en mis tareas robotizadas que hago todo por inercia, como estar
en automático y dejar que mi cerebro programado haga lo que tiene hacer cada día…
ya estaba extrañando mi burbuja olvidada y empolvada… es bueno volver a ese
pedazo de hogar etéreo.
Me acuerdo de aquellos días de verano cuando me amanecía
jugando póker con extraños de cualquier parte del planeta… vaya adicción. Más o
menos comparo lo que haré luego con mi vida a una partida de esas, acabo de
recibir las cartas del dealer, al parecer es una buena mano y tengo varias
jugadas posibles para ganar, así que sólo esperaré a ver que sale en la mesa
para decidir qué carta mostrar primero y salga todo como lo voy maquinando.
Tengo un buen presentimiento, aunque puede convertirse en un optimismo
idealizado al cual sé que me aferraré. Como de costumbre, la probabilidad de
que pierda la partida está latente y tendré que seguir apostando.
Esas situaciones en las que estás obligado a tomar una
decisión en la cual vas a salir perdiendo porque es lo que te convertirá en
“ganador” (aunque suene como antítesis), me provocan migraña y prefiero dormir
para huir del debate. Algo inútil e infantil claro… al despertar el dilema
seguirá palpitando aún más fuerte hasta que te haga perder la cordura y
termines cometiendo alguna idiotez… algo más que seguro. “Sometimes I can think clear, and suddenly I don’t…” que oportuna tonada la que acabo de escuchar.
Así como lo que sube tiene que bajar, así también lo que
viene se va… quiero imaginar que al menos lo más importante permanecerá de
alguna manera, por algún tiempo prolongado, eso me haría sentir mejor y me
daría la expectativa de que no todo es en vano y está perdido.
No tengo la menor idea de cuándo volveré a caminar por estos
callejones con paredes impregnadas de
historias, confesiones y algunas canciones. Quizás será un mejor tiempo cuando
empiece a usar sobretodos y guantes, es más refrescante y reconfortante… por lo
pronto empezaré con la partida de póker, cruzaré los dedos para ganar el pote y
poder tomarme un vaso del mejor whisky.
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4 comentarios:
uy culuju xddddddddddd tqm mi bombom. tu amigo el tin =D!
=)!! tqmil!a ver si captaste mi feeling en esto
Lo q siempre me gusta de cdo escribis es q invitas a la reflexion y el pensamiento. Me alegro q hayas vuelto a escribir! Besos cyb!
si habia visto tu comentario te lo respondi x twitter! gracias por ser mi lector fiel ! :)
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