Lágrimas de cristal


Siempre esperaba ese día recogida en aquel mueble viendo el sunset por mi ventana, el frío de un invierno adelantado me indicaba que la hora estaba cerca, que tú estabas cerca.

Cuan cruel puede ser el destino si uno no cree en él ¿verdad?, tantas noches viendo tu rostro en sueños, tantas veces escuchando tu voz en susurros lejanos, tantas veces que sentía tus manos rodeando mi rostro apaciguado…pero todo se echó a perder por un capricho o por puro resentimiento que fluía, no lo sé y no tengo idea de cuántos minutos perdí intentando encontrar una respuesta.
Eras mi refugio seguro para esconderme, eras lo único que necesitaba para sobrevivir en un desierto, eras la única razón para no dormir una noche cualquiera y tentar llamarte con una lágrima de nostalgia...¿qué pasó?

Aprendí a entender el verdadero significado de tus desvelos, de tus palabras, de tus risas y tus besos, tan hermoso, de nunca acabar.
Pudimos burlarnos del mundo insignificante, de los prejuicios insolentes, pero trato de continuar como si nunca te hubiese conocido, aunque sería como pedir dejar de respirar por un día, tan absurdo y mortal.

Me di cuenta que pensar en una última oportunidad es casi una locura pero no un imposible, no lo sé, ahora es cuando el tiempo juega en mi contra y llega el momento de bajar la cabeza y aceptar que perdí, aceptar que llegó el verdadero final…aceptar que nunca más pronunciaré tu nombre, que nunca más estarás aquí, ¿sabes? Yo sí te quise.

Seguidores

Datos personales

Con la tecnología de Blogger.