9 oct. 06 12:32 a.m. – 1:21 a.m.

Una tarde aparentemente perfecta para reírle al mundo y dejar escapar sonrisas reprimidas… un momento de inspiración bastó para mostrarte mi alma, algo sin querer, algo sin pensarlo, ¿un impulso? o una locura, no lo descifro aún, cada palabra dicha eran almas liberadas con ansias de su prisión fatal, las ideas salían solas, cobraban vida cada segundo, queriendo expresarse, queriendo hablar por el corazón mudo, un corazón torturado por el tiempo, la espera, la ansiedad, la desesperanza…
En mi mente, miles de respuestas desfilaban, esperando leer la tuya para saber si había acertado con las mías, la espera era cruel pero predecible… no era necesario verte a la cara si me imaginaba las expresiones de sorpresa o rechazo, quien sabe.
El frío azotaba mis pensamientos estancados y confusos, el miedo invadía mi pecho y no me dejaba respirar... ¿borrar lo dicho?, imposible, además no me arrepiento, no sabes lo duro y frustrante que es reprimir lo que uno quiere gritar, es más fuerte que las ganas de un ciego por ver los colores del mundo, cuando el corazón calla es morir poco a poco, es estar dormido en un coma, es conocer la desesperación en su esencia, no lo sabes ¿verdad?, aunque lo explique en todos los idiomas no lo entenderías.
Sé que poco importa lo que escriba, sé que hasta incómodo puede resultar leer esto, pensarás que soy una loca sin remedio o una tonta, pero hombre ¡no lo soy!, simplemente desahogo con un trozo de papel todo lo que no podía decir, no por cobarde, sino por miedo al no saber pensar y escoger bien las palabras.
No quiero ni imaginar lo que cruza por tu mente en este momento, solo estoy dando libertad a sentimientos confusos y enredados que se expresan mejor por escrito.
Alguien gana, alguien pierde, una ley de la vida bien aprendida ¿verdad?, pero ¡¿por qué decir que el amor es una guerra?!, absurdo, es sólo un estado del alma, natural, libre…
¿Recuerdas que te dije que siempre hay una vez primera para todo?, irónico, ya sé cómo es de distinto vivirlo que decirlo, te comprendo mejor. Es impresionante saber que existe en el mundo alguien capaz de hacer liberar lo que uno pretende guardar en un silencio extremo y tú bien lo sabes ¿no?
Creo que todo está dicho y lo conoces a estas alturas, añadir algo más ya sería necedad. Sólo te pido que todo lo que haz leído quede en tu mente y en este trozo de papel y no sea merecedor de interpretaciones cursis y equivocadas, tan solo fue un parte de mi vida que no quería que muriera en mi.

En sueños


¿Me puedes decir quién es? Él me miró con una cara de padre amoroso pero a la vez me miró con dolor. -Está bien, pero ella no te podrá ver ni oír.
Yo estaba preparado, en este momento yo debería tener once años y el hecho de conocerla al fin, a aquella persona que sin piedad no me permitió que la conociera, la que no permitió que me alimentara de su pecho me hizo sentir ansiedad.


Bajé, allí estaba en una esquina de la pequeña habitación que a la vez hacía de cocina, sala y dormitorio, no puedo negarlo, era hermosa y con ojos azules pero estaba desaliñada y con unas tijeras a su lado, ¿es que a estas alturas le nació el sentimiento maternal de querer conocerme y tenerme en sus brazos? En ese instante sentí alivio al saber el futuro que me iba a esperar si ella me hubiera dejado nacer.
- Es hora de volver - y me tendió la mano y me dio un fuerte abrazo. –yo siempre te voy a amar en incluso te amé antes de que te crearan, nunca olvides que estaré allí para ti y mi madre que también es la tuya te cuidará.
-Jesús, ¿puedo ir a visitarla en sueños? - ¿porqué lo quieres hacer?
-Porque quiero escuchar su voz, quiero que también me conozca aunque yo sé que me odia y que está mejor sin mí.
Cuando vi que ya estaba dormida en un colchón situado en una esquina decidí entrar en sus sueños.


- Mamá…mami despierta, ¿sabes que tenía ansias de conocerte y poder hablarte mamá?
- ¡Dios mío! ¿Quién eres?, ¿de dónde saliste?, vete, vete por favor.
-Mami yo sé que no me quieres, sólo…sólo quiero saber por qué, ¡por qué lo hiciste madre? Yo no hice maldad alguna cuando reposaba en tu vientre. Fue horrible, quiero contarte cómo fue que me mataste. Estaba durmiendo, soñando en cómo sería tu rostro, cómo sería sentirte abrazado y amado cuando de pronto sentí algo, sentí…¡es terrible! Sentí que algo me jalaba, me hincaba, me destrozaba…
de pronto tuve la sensación de que me quitaban una pierna, luego mi bracito, sentí…sentí una presión de unas grandes pinzas en mi cabecita queriendo destruirla… lo demás ya lo sabes, ¿verdad?, ¿cómo fue?, ¿ qué sentiste cuando me viste destrozado en una sábana enrojecida?, ¿o acaso no quisiste verme?, ¿es que te provoco asco?. ¡Madre!, ¡soy de tu sangre!, ¡soy parte de ti!, ¿por qué me creaste si no me ibas a querer?, que hay de mi padre, él me quiso ¿verdad?, ¿él quería que naciera? Pero no te preocupes ahora estoy más tranquilo, aquí en donde estoy me siento amado de verdad.

-¿hijo, quien te envió?, ¿por qué me atormentas?, ¡déjame en paz!, yo, yo no lo quise hacer, fue él, tu padre, el no quería un hijo y yo tenía miedo de perderlo, ¡vete!, ¡déjame dormir!
-Sí madre ya parto otra vez, no te preocupes ya no te voy a molestar, sólo quería verte, hablarte y que me conocieras. Pero te pido que si algún día llegaras a quedar embarazada, acuérdate de mí, piensa en lo horrendo que sería matarlo, ¡déjalo vivir!, ¡ámalo!


Madre me tengo que ir, me están llamando, pero quiero decirte que aún después de lo que me has hecho hay una cosa que quiero que sepas: te amo y te estaré guardando un lugar junto a mí aquí en el cielo.







Seguidores

Datos personales

Con la tecnología de Blogger.